domingo, 15 de noviembre de 2009

Mi confrontación con la docencia


A diferencia de la mayoría de ustedes compañeros y de los profesores de educación media superior, mi formación y mi profesión es ser maestra. Soy egresada de la Escuela Normal Superior de México con especialidad en educación secundaria. No obstante poseo la capacidad para impartir clases a cualquier nivel, pero por lo antes mencionado se me formó principalmente para trabajar con adolescentes, para atender sus necesidades y problemáticas propias de la edad y para focalizar los contenidos de mi asignatura con base en ello. El trabajar con adolescentes es muy satisfactorio pero a la vez un tanto difícil ya que la adolescencia es una etapa de cambios en todos los aspectos; psicológicos, físicos y biológicos, y no obstante poseo formación que me permite enfrentarme con todos estos cambios, debo reconocer que he tenido ciertos problemas por no ser empática con los alumnos, a pesar de que al iniciar mi labor docente tenía casi su edad. Pero, es que desde que inicié mi praxis, mi principal preocupación y objetivo, es hacer que los alumnos aprendan y no tanto si soy de su agrado o no, ya que como he escrito en otros foros la docencia para mi es una profesión y no como la catalogan y toman lamentablemente algunos compañeros "como relleno”, “para cubrir gastos extra” o “estoy aquí mientras consigo algo mejor".
Para mí la mayor recompensa de mi trabajo no es la gratificación monetaria que recibo por éste, sino cuando logro que los alumnos aprendan, cuando después de concluido el semestre, me buscan y me comentan "con usted si aprendía".
Debo confesar que cuando inicié el estudio de la licenciatura no estaba muy convencida de que si esto era lo que deseaba para mí, si quería pasar el resto de mi vida enseñando, me cuestionaba si de verdad tendría la paciencia y dedicación necesaria. Pero conforme empecé a conocer desde "adentro" la situación en la que está todo el sistema educativo al estar frente a grupo, me fijé un solo objetivo, contribuir desde mi pequeña trinchera al mejoramiento de dicho sistema, a la aplicación de una educación de calidad, a la formación de mejores jóvenes que, aunque se escuche trillado, serán quienes estén a cargo en un futuro de nuestra nación.
Para mí la docencia no solo es una profesión o una forma de vida, es mi contribución a la mejora de un mejor país que tanto adolece y que necesita personas reflexivas, críticas y analíticas.

1 comentario:

  1. Hola Viridiana:

    Muy interesante tu experiencia dentro de la docencia y es cierto eres de las pocas con formación propia para el nivel educativo, sé que esto te da mayores elementos para trabajar y entender a tus estudiantes... Felicidades por ello y gracias por compartirlo!!!

    Saludos

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